A medida que se debilitan las condiciones de la demanda
El sector manufacturero de Estados Unidos se contrae aún más en diciembre a medida que se debilitan las condiciones de la demanda. Así lo refleja el Índice de Gerentes de Compras (PMI) ajustado estacionalmente que elabora S&P Global y que registró 47,2, por debajo del 49,4 de noviembre y de la estimación preliminar publicada anteriormente de 48,2. El dato también ha sido inferior a lo anticipado por el consenso, que había previsto se mantuviera en 48,2.
Menores ventas nuevas totales y ajuste a la baja de la actividad de compra y contratación de insumos
Las menores ventas nuevas totales reflejaron la debilidad en la demanda, y las empresas ajustaron a la baja su actividad de compra y contratación de insumos en consecuencia. Se observaron además a través de una caída más rápida de los pedidos pendientes y la reducción de existencias, y las empresas también buscaron gestionar mejor el flujo de caja. No obstante, la producción se contrajo al ritmo más rápido en seis meses.
Aumento de los costos y reducción de puestos de trabajo
Mientras tanto, a medida que las cargas de costos aumentaron a un ritmo más rápido, las empresas se vieron obligadas a reducir puestos de trabajo. El ritmo de eliminación de puestos de trabajo fue ligeramente más rápido que el observado en noviembre y el más acusado desde junio de 2020. Los fabricantes informaron sobre la no-reemplazo de bajas voluntarias en un intento por reducir costos en medio de menores pedidos nuevos.
Esperanzas de un repunte de la demanda y una mayor inversión en publicidad
Por último, las esperanzas de un repunte de la demanda de los clientes y una mayor inversión en publicidad respaldaron el mayor grado de confianza en tres meses. La producción cayó al ritmo más rápido en seis meses a medida que se intensificó la reciente caída de la cartera de pedidos. Por lo tanto, las nóminas se redujeron por tercer mes consecutivo a medida que un número cada vez mayor de empresas se preocupaba por el desarrollo del exceso de capacidad operativa. En consecuencia, en el cuarto trimestre las fábricas han reducido el empleo a un ritmo no visto desde 2009, salvo sólo los primeros meses de confinamiento por la pandemia, concluye Chris Williamson, economista jefe de negocios de S&P Global Market Intelligence.