SANTIAGO (AP) – Un grupo feminista se reúne para manifestarse contra el borrador propuesto de una nueva Constitución
No queremos, no nos interesa, la Constitución que hizo la derecha, corea un grupo de mujeres en las escaleras de la Biblioteca Nacional del centro de Santiago. La gente que circula ajetreada ocasionalmente levanta la mirada y sigue su camino con la misma indiferencia que suscita en Chile el plebiscito constitucional del domingo.
Coordinadora Feminista 8 M advierte retroceso de derechos en la propuesta constitucional
La Coordinadora Feminista 8 M (CF8M) —un colectivo que recientemente movilizaba a millones— apenas consiguió reunir esta semana a unas decenas de mujeres pero eso no impidió que alzara su voz para recordar el retroceso de derechos que, según advierten, implica la propuesta constitucional que se vota el domingo, el segundo intento después de que en 2022 el 62% de los votantes rechazara un proyecto progresista.
Los grupos feministas temen retrocesos en derechos de las mujeres
Si no se aprueba el nuevo texto, se mantendrá la Constitución de la dictadura vigente durante más de 30 años de democracia con unas 70 reformas. Si se acepta, los grupos feministas temen que se allane el camino para derogar el aborto en las tres causales legalizadas, que se limiten los derechos reproductivos y que hubiera retrocesos en derechos de los niños, en tema de derechos sociales, como las pensiones, y en la participación política de las mujeres.
Las mujeres luchan contra la desinformación y explican los peligros de la propuesta
Carrillo consideró que uno de los deberes de los movimientos feministas era luchar contra la desinformación y explicar alto y claro los peligros de la propuesta. Pero la realidad es que durante la campaña apenas hubo actividad pública, en parte por el golpe que supuso el rechazo a la propuesta progresista del año pasado, pero también debido al hastío y agotamiento que enfrenta la ciudadanía después de diez procesos electorales en menos de dos años y medio, según los analistas.
La expresidenta Michelle Bachelet se pronuncia en contra de la propuesta
La voz de mujer que sí pareció impactar durante la campaña fue la de la expresidenta Michelle Bachelet (2006-2010 y 2014-2018) que participó en la propaganda televisiva y en entrevistas pidiendo el voto en contra y enumerando los retrocesos que supone. Las mujeres que piden la aprobación del texto como Evelyn Matthei, una alcaldesa conservadora y excandidata a presidenta, respondieron calificando de mentiras los peligros enunciados y afirmando que el texto garantiza puntos como la igualdad salarial o guarderías en las empresas. Las organizaciones feministas afirman que la nueva propuesta sería como un viaje al pasado en uno de los países considerados como más conservadores de la región y donde el divorcio apenas se legalizó en 2004.
La propuesta constitucional plantea retrocesos en derechos de la mujer
El nuevo texto que protege la vida del que está por nacer por quién está por nacer podría allanar el camino para derogar el aborto en tres causales legales desde 2017: riesgo de vida de la madre, inviabilidad del feto o violación, la causal más usada por niñas de 13 años, según el gobierno, afirman. Además, la objeción de conciencia institucional como derecho fundamental podría no solo afectar a casos de aborto o la venta de la pastilla del día después sino abrir paso a discriminaciones laborales a personas de las diversidades sexuales o en colegios contra niños de hijos de padres no casados.
La propuesta también cuestiona la paridad de género y la violencia de género
En cuestiones de paridad de género la propuesta plantea una participación equilibrada de hombres y mujeres sólo en listas para cargos de elección popular. Además, olvida el tema de la violencia de género, uno de los problema que más afecta a las mujeres.
Críticas al proceso constitucional y defensores del nuevo texto
Una de las críticas más generalizadas en el proceso constitucional que el presidente Grabriel Boric ha mencionado es que tanto la primera constituyente como la segunda quisieron incluir en sus textos sus propios modelos de país sin entablar consensos con el sector político contrario. Los defensores del texto que se vota el domingo aseguran que la propuesta defiende derechos como la conciliación laboral y que no se aborda el aborto.
Esperanza en cambiar la herencia de la dictadura
¿Podrá Chile romper la herencia de la dictadura alguna vez en materia de derechos de la mujer y en otros? Su tono cambia y se ilumina, con decisión. Confío en que vamos a ser capaces de recomponer la fuerza necesaria para erradicar esa herencia con todo lo que significa.. La historia no está escrita para siempre, afirmó Ingrid González, una activista de 56 años que participó en el acto de la biblioteca.